Hace tiempo me obsequiaron una mascara divina
a cambio de hacer "lo correcto"
Pero los decepcione...
a cambio de hacer "lo correcto"
Pero los decepcione...
Note que la gente, curiosa, se asombraba al verme sin una
Por lo tanto, decidi comprarme una esculpida en oro con diamantes
...Asi descubri la realidad superficial y mi ausencia en el escenario...
Me detuve y mire a mi alrededor, muchos se colocaron diferentes mascaras
Discutieron sobre cual era mejor.
La variedad era inimaginable, habia una para cada ocasion
Todos me las obsequiaban, cada cual queriendo que yo fuera uno de ellos...
Aturdida las arroje todas al vacio
Y me di cuenta...
En realidad no necesitaba mascaras
porque yo siempre tuve un rostro.